lunes, 9 de enero de 2023

POR PIEDAD Y POR BELLEZA

 

   Le cuidaba el auto y limpiaba los vidrios:

   —Mire Sr, no voy a poder cuidar más su auto, mi socio consigue flores del vivero de su Abuela, ella nos regaló tres baldes nuevos y   usaremos esta esquina para venderlas, no se me enoja, ¿no? 

   —Te va a ir bien, porque naciste bueno y mi gorro abriga, te lo regalo.

   Lo miraba en las mañanas grises y esas flores pintaban la vida por un rato. Compró pinceles para hacer cuadros de las flores del niño, cuando secaban, bajaba y le regalaba sus obras, desfasadas de colores plenos, con direcciones exóticas.

   —Ubicalos en esta carpeta para que no se arruguen, son para vos, cuando termine una docena, las vendés, si querés.

   Él era pintor de toda la vida, muy bueno, pero nunca mostró su obra. El niño tomó la carpeta como santas escrituras:

   —Le agradezco con mucheces, Sr, pero vamos miti y miti o no quiero.

   Le dijo que era una buena idea, le dio risa el orgullo del niño, también respeto. Estaban firmados con el nombre del niño.

   —¿Qué te parece hacer una exposición rodante por la Legislatura, Casa de Gobierno, Municipio, todos esos lugares que propician la pobreza? Conozco gente, de la buena gente, que nos permitirá entrar a las oficinas. Acá te traje ropa mía de cuando tenía tu edad, para lukearte de pintor de pincel fino.

   Él realizó veinticinco pinturas más y una mañana salieron al recorrido. El carpetón lo llevó el niño y él fue de curador. Los recibieron bien y les compraron obras, miraban al niño como a un genio. La noticia boca a boca, produjo trabajos por encargo. Como el Sr no quiso aceptar la mitad del milagro, el enano pidió a cambio, que le diera clases y preguntó qué materiales debía comprar. Le pagaba por clase y en cinco años superó a su Maestro. Ganó concursos prestigiosos y tiempo más tarde se instaló en Canadá. Llevó a toda su familia. Su primer Maestro, que era un hombre solo, lo visitaba para las fiestas. Volvía con su maleta y lo sorprendían cheques ocultos en medias y cartas de agradecimiento. Sugería y esperaba, que su Mecenas siguiera pintando. Como hizo él.

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