viernes, 25 de junio de 2021

¿LLEGARÁ?

 

   El Día del Padre, supusimos que vendría. Hacía trece años que no lo veíamos. Lo llamamos por teléfono y lo invitamos para que viniera. Dijo que sí, atendió él, no la bruja de su mujer. Teníamos todo listo, preparamos la comida que antes fue su predilecta.

   Lo esperamos hasta las 2 de la mañana. Pero no vino. Nos mandó un mail que decía: “Estuve complicado, ¿por qué no se vienen para acá?”

    Fue tácito, no le contestamos nada. Dimos vuelta su retrato de joven, ninguna quiso comer. Nos fuimos a pasear al jardín, las cuatro del brazo. Encontramos el árbol que había plantado mi Padre. Hacía frío, nos refugiamos en distintos lugares del árbol. Era un ombú calentito, nos hizo dormir con él. En cada rincón del ombú, estaban gubiados nuestros nombres.

   Cayó una neblina espesa que no nos dejaba descubrir dónde estaba el camino a casa. Vimos un hombre que parecía acercarse o alejarse, dubitaba y eligió acercarse. Las chicas nos juntamos formando una barrera.

   —Sabemos que sos Papá, quedate donde estás.

   Él no hizo caso y ahí estaba. En su vida se había producido algo insólito, estúpido, pero extraordinariamente hermoso y agradable.

No hay comentarios:

Publicar un comentario