NOCHE
CERRADA
Los chanchos revoloteaban
de rama en rama
afuera llovía y adentro
también llovía.
Había un señor leyendo un libro sin letras
bajo una lámpara
apagada.
Tenía sus manos guardadas
en dos bolsillos sin
fondo.
Viste que nos miran pasar
los encontrás detrás de
los cuadros
abiertos a rozarte a vos
y a mí
de noche. De día duermen
en los cipreses
ellos los necesitan para
ayudarlos,
a hacer el amor y
esconderlo
como si fueran sus casas
cipreses con amigos
suelen vivir rodeando
cementerios
y de noche se van de
joda
en
silencio…
UNDER THE TABLE
Se pasan la quesera
de los ravioles de
arriba
por debajo de la mesa
me hacía un guiño
desde arriba
para que le pasara un
poco de vino
por abajo de la mesa.
Jugaban dos niñas
abajo de la mesa
recorrían el mundo
(en secreto)
Son las mismas
que tomaban el té bajo
de la mesa.
Dos primos de cuatro años
“si vos me mostrás, el
tuyo primero
yo te muestro el mío
después”
—¡Ché, loco! Fumate este porro conmigo
abajo de la mesa.
—¿Y los abuelos?
—No tienen olfato
—Vamos afuera
esta mesa nunca sirvió para nada.
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